Frutas, hortalizas, dulces y embutidos forman parte de la despensa de este mes, que incorpora mucho mas sabor, aroma y color ante la llegada definitiva de las altas temperaturas y el sol.
Albaricoques
Consumida desde el año 3.000 a.C., esta fruta llegó a Europa gracias al pueblo romano, que la introdujo a través de Armenia. Brota del árbol llamado albaricoquero y forma parte de la familia de las Rosáceas.
Requiere de temperaturas suaves para crecer, por lo que el clima mediterráneo es propicio para el albaricoque y, de hecho, España es uno de los principales productores.
Destaca por contener minerales como el potasio, el magnesio o el calcio y vitaminas: A y C. También cuenta con betacarotenos (antioxidantes) y taninos. En cuanto a sus propiedades, son beneficiosos para regular la hipertensión, es diurético, también contiene fibra para el tránsito intestinal y refuerza el sistema inmunológico, entre otras muchas .
Pimiento verde
México, Perú y Bolivia son los países en los que se cultivó el pimiento por primera vez, y desde los que llegó a España en 1493, tras el primer viaje de Cristobal Colón a América. Originariamente, se conoce como chili, pero se rebautizo como pimiento en nuestro país.
Desde el siglo XVI comenzó a cultivarse en España y desde ahí lIegó a otras regiones vecinas, como Italia y Francia. Aun así, las variedades carnosas dulces o picantes que conocemos en la actualidad datan del siglo XX. EI pimiento destaca por su gran aporte de fibra y calórico, pero está exento de grasa, por lo que puede emplearse en dietas de adelgazamiento.
La escarola
Esta verdura, al igual que otros alimentos, ya era conocida en la antigüedad por egipcios, griegos y romanos. No sería hasta el siglo XIII cuando la escarola se introduce en Europa.
Puede adquirirse en cualquier época del año, existiendo dos variedades principales: una de hoja rizada más tradicional y otra de hoja lisa y ancha que comenzó a cultivarse en la decada de los 60. Sobre todo se utiliza para preparar ensaladas que pueden acompañarse con distintos alimentos: tomates, atún, huevo duro, trocitos de queso, pasta…
El sabor amargo que tanto la caracteriza se debe a su contenido en intibina, un compuesto al que también se le atribuyen beneficios para el aparato digestivo.
Macarrones
Entre las múltiples variedades de pasta existentes en el mercado. los macarrones son, quizás. junto a los espaguetis, la más consumida. Gusta por igual a grandes pequeños y se trata de un alimento nutritivo pero que no contiene grasas.
Se compone de harina de trigo y agua, a veces también huevo. Como dato curioso, se cree que el nombre de los macarrones proviene del vocablo griego makários, que significa feliz.
Palmitos
Ideales para complementar cualquier tipo de ensalada, los palmitos proceden de la parte más tierna de la palmera. Realmente, se trata de la base anillada de las hojas sin abrir y su sabor y su textura resultan muy agradables. Además, son hipocalóricos y aportan gran cantidad de fibra, vitaminas A y C, proteínas y calcio, por lo que Ie sobran razones para incorporarse a la dieta de cualquier familia.
Dulce "typical spanish" por antonomasia, las rosquillas se basan en una masa hecha a base de harina y huevo
que, según el tipo de dulce que queramos elaborar, puede ser más o menos esponjosa o, incluso, hojaldrada. Se pueden freir u hornear y entre las mas típicas se encuentran las del patrón de Madrid: San Isidro (Ias tontas y las listas).
Verdadero a falso: Absorción de calcio
En nuestro cuerpo tenemos de 1 a 1,5 kg de calcio, el 99% del cual está contenido en los huesos, contribuyendo a su formación y su solidez. Sin embargo, el 1% del calcio restante resulta también esencial e interviene en muchas y diferentes funciones, como la coagulación de la sangre, la contracción muscular, la transmisión nerviosa o la activación de muchas reacciones de nuestro metabolismo.
Las recomendaciones de ingesta de calcio varían según los distintos países y/o organismos internacionales. Para la población española van de 800 a 1.000 mg/día en función de la edad y llegan a 1.500 mg/día en las mujeres lactantes. Se trata de cantidades importantes que hay que satisfacer con una adecuada selección de alimentos.
Falso: Sólo los productos lácteos contienen calcio
Cuando se hace la valoración nutricional de los alimentos que pueden ser fuentes alimentarias de calcio, es muy importante tener en cuenta la llamada biodisponibilidad, es decir, el grado en que nuestro organismo lo puede aprovechar. Así la absorción del calcio presente en algunos vegetales es del orden de sólo el 5%, mientras que en la leche y derivados lácteos, la presencia de lactosa, vitamina D y ciertos aminoácidos favorecen la absorción, que llega a ser del 30%. Así pues, por cantidad y calidad, la leche y algunos de sus derivados son la principal fuente dietética de calcio. De hecho, conseguir el calcio necesario sin tomar lácteos no es imposible, pero sí mucho más difícil. No obstante, hay alimentos no lácteos que pueden ayudarnos a tomar el calcio necesario; es. el caso de legumbres como soja, garbanzos y judías, el sésamo y frutos secos más tradicionales como almendras, avellanas y nueces, hortalizas como la col rizada y los berros, frutas como fresas y naranjas. Además, pescados azules que puedan comerse con espina son también fuentes a considerar. Hoy también podemos encontrar muchos alimentos en el mercado que han sido enriquecidos con este nutriente, por ejemplo, zumos y bebidas de fruta, margarinas y cereales de desayuno.
Falso: El agua no puede ser una fuente significativa de calcio
El agua que bebemos contiene distintos elementos químicos, entre ellos el calcio. Este contenido puede ser sin embargo muy variable, y en consecuencia, también la contribución a su aporte. En el caso del agua embotellada se puede calcular mirando la etiqueta. Por ejemplo, la toma de dos litros de un agua que contenga 50 mg/l aportara 100 mg de calcio.
Minhas receitas dia a dia
Hola Pamela, cualquier queso fresco o requesón es perfecto..
Buen fin de semana para ti también.. besitos..